- Mi madre, maestra vocacional de las de doña, parvulista por oposición en aquellos años 50, los de la larga postguerra rural, me contó que para poder trabajar, necesitaba hacer un servicio social que consistía en reclamar impuestos, armada de burro y acompañada de mi abuelo (o todo lo contrario), por los pueblos de ese León árido de bodega y vino rosa.
En los 90, a mí me tocó conducir una ambulacia durante un año, como alternativa a jugar a la guerra y a esa cárcel que otros, más (o menos) convencidos, conocieron.
En esta ciber-actualidad que pisamos hoy, el mayor compromiso social, no creo que sea apilar bolsas alrededor de una papelera atiborrada de cartones de vino, o sobreformarse ad infinitum, y eso, en el mejor de los casos...
- Sí, perdone, pero ¿me hablaba a mí...?
- ¡Ná! ...se pone mala la tarde, seguro que llueve pronto...
- Mucho llovió este mes, Alegría.
- Y más que lo tiene que hacer. ¡A cántaros!
8 comentarios:
Mi enhorabuena por la renovación de tu casa, amigo!!!
Tiene que llover, un tiempo bastante largo, en muchas partes de este querido mundo que nos alberga...
Un abrazo
BICEFA:
Cuando la conversación se vuelve "intelectuás", se cambia de tercio,jejeje.
Salu2.
Joder, compa. Me bajo del Sol un rato a descansar cuerpo y neuronas y veo que hasta las paredes has pintado.
En Sol sigue lloviendo. Y lo que queda. Aunque ya no salga en tv.
Besos utópicos.
Que llueva, que llueva... y si hace falta tiramos cántaros de agua por la ventana.
SAludillos cantando bajo la lluvia
¿Será lluvia renovadora o de la que sólo ensucia?
Un abrazo, Bicefa.
Bloguerrrrrrrrrrrr estaaaaaáa loooooooooocao
Que escuchen todos esos que todavía siguen secos. Pues a ellos también se les habla.
Un relato de una verdad frecuente.
Un abrazo
Octavius Bot
Tiene que llover. . . . con la que está cayendo!!
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