Cuando duerme la alegría, lo hace de forma serena, no molesta, no ronca, ni da codazos. Su respiración es pausada, acompasada, lenta. Se diría que no tiene ningún miedo, sin preocupaciones, es el león durmiendo en la sombra... y lo sabe, descansa sin ningún temor durante el tiempo que le place.
La pena...¿cuándo duerme? ¿Acaso se convirtió en gacela y teme que su hermana la devore?
Duerme... duerme serena. ¡Ya mereces un descanso!
Duerme... duerme serena. ¡Ya mereces un descanso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario